Fuente: Diario Libre
POR YOHANNA HILARIO
SD. La alimentación de los niños es una responsabilidad de los mayores, y cuando los hijos no quieren comer o nunca tienen apetito, es una señal de alarma para los padres.
Especialistas hablaron de este tema en un panel organizado por la Sociedad Dominicana de Pediatría.
El pediatra Rodolfo Soto Ravelo, vicepresidente de la Sociedad de Pediatría, señaló que la rapidez de la vida actual en los padres afecta la forma y calidad de los alimentos de sus hijos. Señaló que la medicina moderna ha cambiado muchos parámetros en la alimentación.
La pediatra Rosa Acevedo, especialista en nutrición y dificultades de la alimentación, explicó que cuando los niños son hospitalizados tienen riesgo de desnutrirse, aún cuando la enfermedad no sea grave. "Los más pequeños y los que permanecen más de 5 días tienen un riesgo mayor", informó.
"Algunos padres piensan que si los niños reciben hidratación por las venas no necesitan nada más, esto trae como consecuencia días con una alimentación escasa o nula, que va en detrimento de su condición nutricional de base", explicó la experta en gestión y promoción de salud egresada de INTEC y la Fundación de Estudios Sanitarios de Madrid.
Dice que si tienen diarrea, deben después de hidratarse, reiniciar su alimentación habitual lo más rápido posible, evitando así ayunos y desgaste.
Acevedo afirma que está demostrado que la baja ingesta de alimentos es la causa mayor de desnutrición, y no la falta de absorción, como antes se pensaba.
Recomienda que un niño enfermo debe recibir líquidos en abundancia, no iniciar comidas nuevas, ofrecer pequeñas cantidades a intervalos más cortos pero nunca utilizar la fuerza; en un ambiente agradable dejarlo que interactúe con la comida con todos sus sentidos.
En tanto que la psicóloga clínica, Roxana González, dijo que la gran mayoría de los niños que recibe en su consulta por problemas alimenticios, han sufrido algún trauma emocional.
Dijo que los niños son afectados por diversos traumas en sus primeros años de vida, como consecuencia de malos hábitos en la alimentación o mal manejo de los padres. Citó entre situaciones que causan traumas a los niños alimentos excesivamente calientes, agrios, picantes, falta de paciencia de los padres y poca atracción en los niños hacia las comidas por la mala presentación de las mismas.
Explica que el amor y la paciencia son factores que pueden ayudar a lograr que el niño coma exitosamente. "Si se usa la comida como castigo, y se obliga a comer a la fuerza, no se logran progresos", destacó.
Para evitar situaciones como estas, es importante que los niños tengan una alimentación sana, variada, que incluya todos los grupos de alimentos (carnes, vegetales, lácteos, frutas y cereales). Cada uno de estos aporta nutrientes esenciales para el crecimiento y desarrollo del niño.
Algunos datos importantes
Los niños son más propensos a desnutrirse que los adultos, necesitan más y tienen menos reservas.
Un infante que no come bien, no rendirá en la escuela. Recuerda que el desayuno es una de las comidas más importantes del día.
La vitamina A y el zinc son dos aliados muy importantes en la reducción de la morbi-mortalidad infantil.
Los probióticos contribuyen a disminuir la duración de un episodio diarreico en 24 a 30 horas.
La desnutrición causa problemas en el crecimiento y desarrollo.
La malnutrición dificulta el aprendizaje.
Disminución de la capacidad de trabajo y de adaptación social en la vida adulta.
Deficiencia en el desarrollo.
La malnutrición puede ser causa de procesos infecciosos.
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